
Un año después de la tragedia que le costó la vida a 119 personas como consecuencia de la explosión de una pipeta en la iglesia de Bojayá, en medio de los enfrentamientos entre Farc y Autodefensas, la Defensoría del Pueblo investigó las condiciones en las cuales se ha dado el retorno de 1.744 familias que se desplazaron desde ese municipio hacia Quibdo.